Confederación Regional Obrera Mexicana

La Confederación Regional Obrera Mexicana (CROM) es una organización sindical histórica en México que ha desempeñado un papel fundamental en la lucha por los derechos laborales y sociales del pueblo trabajador. Fundada en 1918, poco después de la Revolución Mexicana, la CROM surgió como respuesta a la necesidad de unidad y representación ante las dificultades económicas y sociales que enfrentaban los trabajadores mexicanos. Su creación marcó un hito en la historia sindical del país, estableciendo una confederación nacional con el objetivo de defender los intereses de los obreros frente al poder capitalista.

A lo largo de su trayectoria, la CROM ha experimentado diversos momentos de auge y declive, marcado por cambios políticos, económicos y sociales. Su influencia se extendió a diferentes sectores productivos, desde la industria manufacturera hasta el sector agrícola, logrando importantes logros en materia de salarios, condiciones laborales y acceso a servicios básicos para los trabajadores.

La Formación de la CROM

La necesidad de una organización sindical nacional que aglutinara a los trabajadores mexicanos se hizo evidente tras la Revolución Mexicana. Los conflictos entre sindicatos locales, la inestabilidad política y la falta de representación ante las autoridades generaron un clima propicio para la creación de una confederación que pudiera dar voz al movimiento obrero.

En 1918, en el contexto de la búsqueda de unidad sindical, se convocó a un congreso en Saltillo, Coahuila, donde se fundó la Confederación Regional Obrera Mexicana (CROM). Este evento marcó un punto de inflexión en la historia del movimiento obrero mexicano, ya que por primera vez se logró la unión de sindicatos de diferentes sectores y regiones del país bajo una misma organización.

La CROM adoptó como estrategia principal el sindicalismo reglamentado y eficaz, buscando la negociación colectiva con los empleadores para mejorar las condiciones laborales. Se buscó también la integración de la acción política al movimiento obrero, dando origen al Partido Laborista Mexicano (PLM) en 1920, con el objetivo de influir en la toma de decisiones políticas a favor del pueblo trabajador.

La CROM y el Cambio Político

La CROM se vio envuelta en las transformaciones políticas que marcaron la primera mitad del siglo XX en México. Durante la presidencia de Álvaro Obregón (1920-1924), la CROM tuvo una estrecha relación con el gobierno, participando activamente en la construcción del nuevo orden político y social.

Sin embargo, las relaciones entre la CROM y el gobierno se tensaron durante la década de 1930, con la llegada al poder de Lázaro Cárdenas (1934-1940). La política nacionalista y antiimperialista de Cárdenas generó tensiones con sectores empresariales que veían en la CROM una amenaza a sus intereses.

La creación de la Confederación de Trabajadores de México (CTM) en 1936, liderada por Vicente Lombardo Toledano, marcó un punto de inflexión en el panorama sindical mexicano. La CTM se posicionó como una alternativa al modelo de la CROM, adoptando una postura más radical y cercana a las ideas del comunismo.

Resumen

La Confederación Regional Obrera Mexicana ha sido una fuerza histórica en la lucha por los derechos laborales y sociales en México. Su creación marcó un hito en el movimiento obrero nacional, impulsando la organización sindical y la búsqueda de mejores condiciones para los trabajadores. A lo largo de su trayectoria, la CROM ha experimentado momentos de auge y declive, adaptándose a las transformaciones políticas y económicas del país.

Si bien la influencia de la CROM ha disminuido en las últimas décadas, su legado sigue presente en la historia sindical mexicana. Su contribución al desarrollo del movimiento obrero y a la defensa de los derechos laborales ha dejado una huella indeleble en la sociedad mexicana.